Las instalaciones a cielo abierto de la Refinería de Petronor tienen un total aproximado de 20.000 puntos de luz. Esta es la respuesta a la pregunta que con más frecuencia han formulado nuestros lectores desde que el pasado mes de enero se ofreció al público esta página web. Frente la presunción generalizada de que las luces son prácticamente todas ellas iguales o parecidas y tienen una función de posición, la realidad es muy otra.
La inmensa mayoría de las bombillas no persiguen el fin de marcar posición sino, muy al contrario, de alumbrar en todo momento todos los ámbitos de trabajo en los que en alguna situación determinada sea necesario actuar u operar. Es decir, en otras palabras, son puestos potenciales de trabajo a los que los operarios pueden y deben llegar si fuera preciso.
Además, ni todas las luces son iguales ni tienen idéntico color. En cumplimiento de estrictas normas de seguridad, su luminosidad se adecua en cada punto a las exigencias operativas, y el color, habitualmente blanco, cambia en caso de avería o incidencia con objeto de hacerse distinguir.
En la cifra apuntada de 20.000 no están incluidos los puntos de luz instalados en el interior de edificios de la Refinería, como salas de control, subestaciones, vestuarios, oficinas etc.