El Centro de Comunicación y Divulgación de las Encartaciones, “Trueba”, junto con el colectivo Pobeña Auzolaguna y el patrocinio del Ayuntamiento de Muskiz, revivió ayer el pasado minero del barrio muskiztarra.
Por tercer año consecutivo, Pobeña ha conmemorado su historia minera representando el acarreo de mineral tal y como se hacía a finales del siglo XIX, antes de que dejara de transportarse por cabotaje. La encargada de transladar el mineral de hierro hasta las ferrerías ha sido la embarcación Cantu Santa Ana de Castro Urdiales.
Fueron varios los escenarios en los que se reflejó aquella época y se mostró el modus vivendi y oficios de aquella gente: taberneros, lavanderas, artesanos, hortelanos, campesinos, ganaderos, panaderos… Más de 100 pobeñenses rindieron homenaje a sus padres y abuelos mineros.
Este año como novedad, se ha realizado una exposición de bateles recuperados con su respectiva escenificación. Los encargados de la misma han sido el grupo de bateleros de la Asociación Euskal Bateleroak, (4 remeros, 1 patrón y 1 timonel).