En el debate Perspectivas y retos empresariales para los próximos años, se le preguntó por la evolución del precio del petróleo, que ha subido hasta los 77 dólares el barril. “Cuando haya mayor inestabilidad internacional subirá, cuando haya menos, bajará. Hay analistas que dicen que podría llegar a los 105 dólares. Yo no apostaría, puede ser o no, es el mundo de Rappel”.
“Lo que sí es cierto – explicó Atxurra- es que el mundo del petróleo está directamente relacionado con la geopolítica y con el nivel de reservas de los EEUU”. “Ahora estamos en un momento con un escenario delicado en Oriente Medio, con una guerra fría y unos países del Golfo como Arabia e Irán, que han decidido que con sus reservas van a ser potencias tecnológicas, lo que hace subir el precio”.
En ese contexto geopolítico “hay una administración, la de Trump, que está jugando sus propios juegos, y se ha puesto al frente de la manifestación frente a las necesidades de China, que tiene flujos muy significativos con Irán. Mientras, Estados Unidos no tiene problemas de precios, los tenemos los europeos”. Atxurra aseguró que “el petróleo no desaparecerá en un mundo con 7.000 millones de personas”.
Y auguró que seguirán las luchas geopolíticas por la energía: “China tiene el control de las materias primas para el vehículo eléctrico, y va a instalar en unos meses la principal fábrica de baterías eléctricas en Marruecos”.
“El mundo se ha hecho grande y nos ha hecho pigmeos. Europa somos el extremo occidental de Eurasia, y España más. Además, estamos en una endiablada marcha de cambios tecnológicos donde la musculatura es importante. Si no somos capaces de cooperar, nos vamos al desagüe”, concluyó.