La construcción de esta terminal forma parte del acuerdo de colaboración a largo plazo formalizado en 2019 entre Repsol y Brittany Ferries para el suministro de GNL en sus operaciones en el Estado. Está previsto que esta instalación se ponga en marcha en el primer semestre de 2022.
La terminal de Bilbao contará con un tanque criogénico con una capacidad de almacenamiento de 1.000 metros cúbicos, que permite mantener el gas natural en estado líquido a -160ºC. El diseño flexible de la terminal permitirá dar servicio a distintas embarcaciones en el futuro, lo que representa una importante oportunidad de descarbonización para las operaciones en el puerto.
Este proyecto es una clara apuesta de Repsol por el desarrollo industrial y supondrá una inversión superior a 10M€. A esta terminal se sumará la construcción de una segunda de la misma capacidad en Santander. Ambas terminales están cofinanciadas por la Comisión Europea a través del programa CEF- Connecting Europe Facilities Programme.
La construcción de las terminales de Bilbao y Santander es un paso más de la compañía para alcanzar su objetivo de ser cero emisiones netas en 2050, apostando por el GNL como combustible alternativo para buques.
En concreto, la gasificación de las líneas de Brittany Ferries que operan en Bilbao y Santander permitiría reducir al año aproximadamente 73.000 t/CO2, equivalente a las emisiones medias de 50.500 coches al año.