El entorno se ha caracterizado por:
- Un nivel muy deprimido de precios de petróleo y gas originado por el aumento de la oferta.
- Márgenes altos de refino consecuencia de la apertura de diferenciales entre los crudos pesados y ligeros, del buen comportamiento de las gasolinas de los fueles.
- El fortalecimiento del dólar por la positiva evolución de la economía americana.
Durante el ejercicio, las cotizaciones internacionales de las materias primas sufrieron un fuerte descenso, con una caída del 47% en el Brent, hasta situarse en un precio medio de 52,4 dólares/barril. Este pronunciado descenso, mitigado en parte por la fortaleza de la moneda americana, ha originado en resultados una pérdida de 66 millones de euros.
El Ebitda alcanzó los 282 millones de euros, tras absorber una pérdida patrimonial de 66 millones de euros, situándose muy por encima de los -46 obtenidos en el ejercicio 2014.
Los indicadores industriales y de actividad de la compañía experimentaron significativos crecimientos en el ejercicio 2015:
- Niveles máximos de destilación alcanzando valores anteriores a la crisis, 70 millones de barriles procesados equivalentes a 10,5 millones de toneladas, un 90,6% de la capacidad teórica.
- Las ventas se han situado en 10,9 millones de toneladas superando en un 8% las realizadas en 2014. Ante la debilidad del consumo del mercado nacional un 41% de las mismas se han orientado a la exportación.
- Dentro del programa de mejora de la eficiencia energética de las instalaciones se han implementado medidas que han conseguido reducir el consumo energético en 53 mil toneladas de fuel oil equivalente, aportando al resultado 22,4 millones de euros.
En términos unitarios todos estos logros han posibilitado que el margen se sitúe en 8,40 $/bbl, un 120% por encima del obtenido en 2014, más de 5 dólares barril por encima del punto de equilibrio.
Con la caja generada se ha acometido un ambicioso plan de restructuración de la deuda que ha permitido reducir la deuda 358 millones de euros. El endeudamiento neto se ha reducido del 65% a finales de 2014 al 47% que recoge el balance al cierre de 2015.
El Consejo de Administración ha acordado, a principio de 2016, la distribución de un dividendo a cuenta de 28 millones de euros.
En 2016, no cabe pensar que las mejoras coyunturales van a asegurar la viabilidad. Si, de conformidad con la visión de la compañía, se pretende “ser una empresa energética segura y altamente eficiente, comprometida con la innovación permanente en todos sus procesos productivos y de gestión; un buen vecino que minimiza los impactos derivados de su actividad, motor del desarrollo de su entorno y referente en la búsqueda de nuevas oportunidades de negocio”, se debe seguir profundizando en el proceso de transformación iniciado a finales de 2013:
- Adaptando la cultura y el modelo de gestión a los nuevos retos, son necesarias personas capaces, comprometidas e ilusionadas.
- Maximizando la eficiencia a través de la excelencia operativa, la optimización del esquema productivo y la flexibilidad organizativa.
- Minimizando los impactos derivados de la actividad, (máxima seguridad, tolerancia cero e integración con el entorno dado respuesta a las expectativas generadas en el entorno).
- Gestionando la innovación de forma abierta y rentable.
Esta forma de actuar asegurará la rentabilidad y la sostenibilidad de la actividad de la empresa.
*Informe y cuadros de cifras, aquí.