Repsol ha obtenido en 2016 un beneficio neto de 1736 millones de euros, el mayor alcanzado por la compañía en los últimos cuatro años, lo que refleja tanto su fortaleza y flexibilidad como el éxito del programa de actuación puesto en marcha para responder a la caída de los de los precios del crudo y del gas.
La compañía cerró el ejercicio con una producción media de hidrocarburos de 690.200 barriles equivalentes de petróleo al día (bep/d), lo que representa un aumento del 23% respecto a los 558.900 bep/d de 2015.
La acción de Repsol se revalorizó un 33% y registró una de las mayores subidas del IBEX35 y del sector del petróleo y el gas en Europa.
Repsol ha mantenido en 2016 su liderazgo europeo en términos de márgenes de los negocios industriales y comerciales, gracias a la buena calidad de los activos de la compañía, a las mejoras operativas realizadas y a una gestión activa de las oportunidades comerciales.