El hallazgo extiende en 32 kilómetros una formación descubierta en campañas de exploración previas, en la zona de Pikka. Los recursos identificados actualmente en la formación de Nanushuk son de aproximadamente 1.200 millones de barriles recuperables de crudo ligero.
El plan de desarrollo preliminar de Pikka contempla que la producción se inicie a partir de 2021, con un potencial de alrededor de 120.000 barriles de petróleo al día.
Repsol lleva explorando activamente en Alaska desde el año 2008 y desde 2011 la compañía ha realizado múltiples descubrimientos en esta zona.
Repsol cuenta con una participación del 25% en Horseshoe y del 49% en Pikka. Armstrong dispone del porcentaje restante y es actualmente el operador.
El pozo Horseshoe-1, perforado a una profundidad total de 1.828 metros, descubrió una columna neta de petróleo de más de 46 metros en distintos reservorios de la formación Nanushuk. Por su parte, en Horseshoe- 1A, perforado a una profundidad total de 2.503 metros se encontró una columna de crudo de más de 30 metros, también en Nanushuk.