Esta feria, organizada por el Ayuntamiento minero y Enkartur, con la colaboración de Petronor, reunió a unas 2.400 aves de las más variadas especies y cerca de 250 criadores de Euskadi, de todo el Estado y Francia en el frontón Txikito de Gallarta y en una ampliación del recinto en una Carpa ubicada en el parque Blasco ibañez. Además, se ofrecieron varios espectáculos, talleres infantiles y, como novedad, un mercado agroalimentario con 15 puestos de productos certificados.
Los jueces –procedentes de catorce comunidades autónomas diferentes y de Francia—tuvieron que deliberar sobre la belleza y otras dotes de los ejemplares participantes. Se dieron cita cientos de gallinas, algunas llamativamente gigantes y otras de apenas un palmo. También hubo palomas, pavos, anátidas, pájaros, etc. Además se permitió la incursión de algún que otro mamífero, como los conejos.
La feria, que este año ha celebrado su tercera edición, quiso abrirse a la participación de la hostelería local con un protagonista inevitable: el huevo. Durante las tres jornadas, varios establecimientos ofrecieron una amplia selección de ingeniosos pintxohuevos.