Ángel Ignacio González Zorrilla se jubila tras 31 años de trabajo ininterrumpido en Petronor y 43 años de vida laboral sin una sola baja, ni por enfermedad ni por accidente. A este respecto comenta que “la genética influye, el saber cuidarse un poco, la actitud y la profesionalidad también”.
Ángel nació en Muskiz en 1954, y apenas tenía 17 años cuando empezó como delineante en Babcock & Wilcox. Allí permaneció durante 12 años. Pasó más tarde a Petronor, donde ha desarrollado 31 años de vida laboral como Operador de Planta.
En ninguna de las dos empresas sintió nunca la necesidad de coger baja. A pregunta de si las jóvenes generaciones son ahora más blandas, contesta de inmediato: “Ahora también hay gente dura y trabajadora, hay que creer en ellos”.
Sobre su peor momento en los 43 años de vida laboral comenta que “no he tenido momentos malos en el trabajo. Todo resulta mejor y más fácil con planificación, previsión y siendo profesional”. Sobre el mejor recuerdo señala que “ha habido muchos buenos momentos, y los habrá también de aquí en adelante. Lo importante es trabajar con profesionalidad. Pero cuando se acaba, surge otra vida.”
Agur, Ángel. Todo un ejemplo de saber hacer, de saber actuar, de saber colaborar y de saber comprometerse. Todos tus compañeros te desean suerte en tu nuevo ciclo de vida.