El URF se renueva tras la Parada

Unidad de Reducción de Fueloil.
Petronor ha destinado un presupuesto total de cerca de 49 millones de euros en la revisión de las instalaciones de la Unidad de Reducción de Fueloil o Planta de Coque. La refinería ha aprovechado además la Parada General de esta planta para realizar nuevas inversiones e incorporar las últimas tecnologías en sus procesos. Todo ello con dos objetivos claros: Seguridad e Innovación, fruto del compromiso de Petronor con las personas y con su entorno.

La Unidad de Reducción de Fueloil se inauguró en abril del 2013 y supuso una inversión de 1.006 millones de euros, la mayor inversión industrial realizada nunca en Euskadi. El proyecto URF surgió para adecuar la estructura de producción de Refinería a la reducción del consumo de fueloil y a la creciente evolución de la demanda del gasoil.  La Planta de Coque garantiza la continuidad de la empresa y aumenta la producción de productos con mayor demanda como el propano, butano, gasolina y gasóleo.

El balance de los primeros años de la planta es sin duda positivo. Además de superar las previsiones de Petronor  y lograr un rendimiento por encima de los valores contemplados inicialmente, el proyecto URF ha traído consigo una reordenación de todos los procesos, con una modernización y actualización de la refinería en su conjunto. Asimismo, se ha conseguido la optimización de la producción, con menor consumo y mayor eficiencia energética.

Cuando, hace 49 años, se creó Petronor alrededor del 50% de los productos eran fuelóleo. Posteriormente, en 1978, con la construcción de la segunda refinería, aumentó la capacidad de producción pero el porcentaje de fuelóleo era esencialmente el mismo. En 1985, con la puesta en marcha de la unidad de Conversión se redujo a un 30% aproximadamente. Ahora, gracias al URF, Petronor, que refina unos 11 millones de toneladas de crudo al año, ha logrado que el fuelóleo solo represente en torno al 8% de los productos que obtiene del petróleo, mientras que el diésel, el combustible de mayor valor añadido para la compañía, supone ya el 50% de la producción. Además genera 700.000 toneladas de coque de petróleo al año, un combustible muy utilizado en la industria del cemento y en las centrales eléctricas.