El presidente de Petronor, Emiliano López Atxurra, fue quien hizo entrega del premio, instituido por Estrategia Empresarial en 2018, en su 25 aniversario, y que no pudo celebrar su segunda edición en 2019 por la pandemia. José Ignacio Arrieta, fallecido en marzo de 2018, fue consejero de Industria y también de Trabajo y Seguridad Social del Gobierno Vasco, además de consejero de Petronor y de Repsol Comercial, y a él se deben logros como el Plan Integral de Lucha contra la Pobreza, las Ayudas de Emergencia Social o el Ingreso Mínimo de Inserción, antecedente de la RGI.
López Atxurra señaló que “el compromiso por hacer frente a las adversidades desde una proposición positiva, el coraje y la colaboración” fueron en Euskadi esenciales en momentos difíciles como los de la reconversión industrial “para hacer un país mejor” a pesar de la crisis actual. “El compromiso, la colaboración, el conocimiento son elementos esenciales” para avanzar, recalcó, antes de agradecer a quienes “siguen haciendo empresa” a pesar de las dificultades.
Biolan es una empresa nacida en 2009 que trabaja para mejorar las capacidades analíticas en el sector alimentario y de la salud, y su CEO, Asier Albizu, destacó la importancia de la responsabilidad social corporativa en su acción empresarial, así como el crecimiento que han experimentado gracias a la internacionalización.
En la presentación del evento, el consejero delegado de Estrategia Empresarial, Roberto Urkitza, señaló que “miles de compañías practican en Euskadi el compromiso social, la responsabilidad social corporativa o el alineamiento con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, que tan importantes han sido “cuando hemos sufrido las consecuencias de la pandemia”. Así, sostuvo que en los momentos más complicados muchas empresas vascas “han trascendido los objetivos económicos haciendo suyo el compromiso con el entorno”, característica que “personificó José Ignacio Arrieta”.
Antes de la entrega del galardón intervino la directora de la Obra Social de la BBK, Nora Sarasola, quien resaltó que “es posible, justo y necesario marcar a fuego una vertiente más humana” en el desempeño empresarial, “para garantizar nuestra propia sostenibilidad”.
Posteriormente Eider Inunciaga, directora de BBK Kuna, y José Ignacio Zudaire, director de Personas y Organización y de Relaciones Institucionales de Petronor, mantuvieron un diálogo moderado por Roberto Urkitza. La primera se refirió a la importancia de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, mientras que el segundo mencionó que para las empresas como Petronor es un vector fundamental “minimizar impactos y ser motor económico de la zona” para lograr la licencia social para operar.
En ese sentido, explicó que en Petronor ya se equiparan “las variables técnicas y las medioambientales en el mismo plano”, ya que “no hay que llevar la eficiencia al máximo si se perjudica al medio ambiente”. Finalmente glosó la figura de José Ignacio Arrieta, “una persona adelantada a su tiempo”, de quien aprendió, entre otras muchas cosas, “a mirar más allá de los números y ver a las personas” y que “una de las bases de la competitividad es tener un sistema social adecuado”.
Cerró el acto la vicelehendakari Idoia Mendia, quién señaló que “la sostenibilidad, el arraigo, la calidad del empleo, la confianza de la empresa en sus trabadores, la implicación de las personas trabajadoras en el proyecto empresarial, la solidaridad y el compromiso público” han sido los fundamentos para empezar a salir de la crisis originada por el covid, añadiendo que ahora corresponde mirar a un futuro marcado por “una profunda transformación digital, energética y sociosanitaria”. Para finalizar, premiados y autoridades, entre los que estaban el alcalde de Bilbao y la diputada foral Ainara Basurko, pudieran hacerse una foto de familia.