Muskiz recupera su pasado minero con la inauguración de la escultura de un barrenador en la Plaza Meatzari. El acto, asociado al evento “Pobeña 1980” y organizado por el Ayuntamiento de Muskiz y el Centro de Documentación y Divulgación de las Encartaciones “Trueba”, ha sido todo un homenaje a la minería tradicional.
Una escultura de bronce de un barrenador se descubría ayer al mediodía en la Plaza Meatzari con el objetivo de reivindicar la herencia minera que nos dejaron nuestros aitites. Una obra de 2 metros de alto sobre un pedestal de mineral de hierro donado por el Museo de la Minería de Gallarta.
El alcalde de Muskiz, Borja Liaño, el presidente de Trueba, Ricardo Santamaría, el concejal muskiztarra Gontzal Riancho y el escultor de la obra, Joaquín Alcalde, estuvieron presentes en este tributo a la minería.
Por la tarde el Doctor Manuel Marcos García dio una charla en el Meatzari sobre la tesis que realizó hace ya 40 años: “Los hospitales mineros de Triano”. Además de darnos a conocer “el infierno de vida que llevaban”, Manuel Marcos nos habló de la importancia y méritos del Doctor Enrique Areilza, que lo definió como “un rayo de luz en la desgracia”.