¿Qué balance hace de la actividad de Petronor del año 2012?
El pasado año, por motivos diversos, ha sido un año ciertamente difícil y también atípico en la historia reciente de la compañía, marcado por dos hitos destacables. Iniciábamos el ejercicio con las unidades de Conversión paradas, hecho insólito desde que entraron en operación en 1985, debido a los bajos márgenes de refino, fruto de un escenario de contracción de la demanda de combustibles en un momento de exceso de capacidad de producción. A la vez nos encontrábamos en la fase inicial de producción de las nuevas unidades del proyecto URF, lo que n
¿Qué previsiones tiene para este año con la URF a pleno funcionamiento?
Las unidades que componen el proyecto URF comenzaron su puesta en marcha a finales de 2011 y se ha conseguido alcanzar su capacidad de diseño, me atrevo a afirmar, en un tiempo récord considerando su complejidad, no solo por el aspecto tecnológico sino por la incidencia en el proceso productivo. En enero de este año 2013 hemos alcanzado en la unidad de coquización los 2 millones de toneladas de carga prevista en el diseño de la planta con un funcionamiento muy estable, lo cual nos va a permitir aumentar la producción de combustibles de mayor valor añadido, gasóleos, gasolinas y naftas, en los porcentajes previstos, en detrimento del fuel oil con demanda claramente a la baja, y a la vez que ponemos en el mercado un nuevo producto como es el coque de petróleo.
De esta forma nuestro funcionamiento está siendo más eficiente y sostenible al no requerirse aumentar la cantidad de crudo procesado, lo cual nos está permitiendo afrontar con mayores garantías el futuro tanto inmediato como a medio plazo, en una coyuntura económica de crisis que está afectando a la actividad industrial y doméstica lo cual se traduce en unos muy bajos niveles de consumo.
¿A qué nuevos mercados acceden ahora con los nuevos productos?
Es importante destacar que, con motivo de la menor actividad empresarial y las ampliaciones acometidas en las refinerías españolas, determinados paradigmas están cambiando en este sector en España, el más impactante relativo al consumo de gasóleos. Históricamente existía una capacidad excedentaria de gasolinas que obligaba a exportar parte de nuestra producción, en el caso de Petronor al mercado norteamericano, mientras que a nivel de gasóleos el balance era muy deficitario lo cual obligaba a importar cantidades importantes de este combustible. Actualmente esta situación se ha dado la vuelta, y concretamente en 6 años se ha pasado de un déficit de 13,5 millones de toneladas en 2007, a un exceso de 2,7 Mt previstos en 2013.
Esto nos está obligando a realizar un intenso esfuerzo comercial tanto para seguir colocando producto en el mercado nacional, luchando contra las importaciones que se siguen produciendo aunque en menor medida, como para venderlo en el mercado internacional aunque sea con unos márgenes inferiores al del mercado interior. Y esto solo es posible suministrando un producto de calidad que cumpla las especificaciones requeridas por los clientes de los países destino y pueda así competir con los de los empresas existentes en ellos. Un ejemplo claro es el mercado francés, un hinterland natural en el que Petronor ya exporta productos como el asfalto pero en el que ahora debe focalizarse más para vender también gasóleos y gasolinas.
¿Cómo afronta Petronor la actual situación de crisis?
Como ya se ha indicado nos estamos enfrentando a descensos continuos de la demanda y por tanto de las ventas, lo que unido a un precio más elevado de nuestra materia prima, el crudo, hace que también estemos sufriendo la situación de esta crisis, al igual que muchos otros sectores industriales. Por este motivo solo nos queda una alternativa, ser cada vez más eficientes y apostar por la innovación tecnológica y de gestión de forma que podamos seguir diferenciándonos de nuestros competidores.
Esto solo pasa por la mejora continua en todos los aspectos que influyen en nuestro negocio de forma que la operativa sea excelente para alcanzar la máxima disponibilidad de producción con una optimización de costes. Por ese motivo, entre otros, estamos acometiendo un plan de eficiencia energética y reducción de CO2 desde el año 2010 ya que nuestro mayor coste es la energía y queremos reducir un 15% nuestras emisiones. Para ello estamos acometiendo un plan de inversiones de más de 100 millones de euros. Asimismo también hemos elaborado un plan de acción para la mejora de resultados que contempla todos los aspectos clave del negocio con incidencia directa en los ingresos y en los gastos, en el cual está implicada toda la organización.
¿Cómo se han visto afectados los aspectos medioambientales en la planta con las nuevas plantas de cogeneración y URF?
El proyecto URF se ajustó desde el inicio y en todo momento a las exigencias medioambientales y ha sido nuestra gran apuesta por la innovación y la mejora. El año 2006 se efectuó el Estudio de Impacto Ambiental en el que se tuvieron en cuenta las mejores técnicas disponibles en el mercado (MTDs). El Gobierno Vasco formuló la Declaración de Impacto Ambiental y se concedió la Autorización Ambiental Integrada en 2008.
Las visitas de inspección realizadas por técnicos de las administraciones han verificado que se han cumplido los requerimientos incluidos en la Autorización Ambiental Integrada, donde debemos resaltar los analizadores de emisiones, los elementos de control de partículas en el manejo, almacenamiento y transporte de coque y azufre, y las mejoras incorporadas en la planta depuradora de aguas de refinería (DAR).
Durante estas inspecciones, Petronor ha podido demostrar su compromiso ambiental con el entorno ya que la incorporación de medidas consideradas como MTDs ha supuesto un importante esfuerzo inversor aplicado a este proyecto. Creo que así se está percibiendo en nuestras instituciones y sociedad, ya que estamos recibiendo reconocimientos diversos a nuestra Sostenibilidad, como los premios Hemendik y Capital, y esto es fruto de las personas de la compañía que trabajan en equipo y demuestran su gran profesionalidad.
¿Qué valoración realiza sobre el premio recibido el pasado año en seguridad laboral por parte de Mutualia?
La Seguridad está en el ADN de la compañía desde sus orígenes y, al igual que el Medio Ambiente, es una de sus señas de identidad en la que está comprometida toda la organización, desde el presidente hasta el último trabajador, pasando por el equipo directivo, jefes, línea de mando y delegados de prevención.
Nuestros niveles de seguridad, tanto personal como industrial, están a la altura de las mejores empresas no solo del sector refino sino del industrial, como así lo reconocen los reaseguradores internacionales tras sus exigentes auditorías periódicas en la que nos evalúan multitud de parámetros, lo que supone un proceso objetivo de comparación con nuestros competidores.
El premio en seguridad laboral de Mutualia, que hay que recordar es bienal y se concede a la empresa con mejor desempeño y resultados en esta materia de entre 22.600 organizaciones, es una muestra más de reconocimiento que debemos valorar en su justa medida y que nos demuestra el compromiso de Petronor con la seguridad y salud de sus propios trabajadores y con los de las empresas contratistas que prestan sus servicios en la refinería.