Lución, un lagarto sin patas

Uno de los reptiles más abundantes de las campas adyacentes a la refinería de Petronor y a la ría del Barbadún, junto a la lagartija roquera, es el lución, (Anguis fragilis), un pacífico e inofensivo animal, que a pesar de tener el "amenazador" aspecto de un ofidio, en realidad se trata de un saurio, que según diversas teorías, ha perdido sus patas a lo largo de su evolución.




Capaz de alcanzar hasta el medio metro de longitud, al lución se le puede localizar, desde la primavera hasta el otoño, prácticamente en cualquier monte o bosquecillo de Muzkiz, Abanto, Somorostro y los montes de Triano, ya que es una especie que únicamente precisa humedad, vegetación y lombrices de tierra para sobrevivir.

Ampliamente distribuido por toda Europa, únicamente está ausente en el sur de la Península Ibérica, en Irlanda y en el extremo norte de este continente. También se extiende por el Cáucaso y el SO de Asia, donde se han hallado ejemplares a 1.900 metros de altura.

Habitante de los prados húmedos

El lución es un animal bastante tímido y de costumbres huidizas, aunque no teme la presencia humana y muy a menudo habita en jardines y campos cercanos a pueblos densamente humanizados.

Suele vivir solitario bajo las piedras, hojas o troncos caídos que se encuentran desperdigados en los campos de hierba, claros de bosques y lugares de matorral exhuberante.También acostumbra a acondicionar su morada en hoyos del terreno, entre el musgo o bajo las raíces. No teme a las hormigas, por lo que a veces comparte con ellas sus hormigueros.

Sus movimientos, caracterizados por su lentitud, no se parecen en nada a los de los demás saurios, ni a los típicos de las serpientes. Este reptil se ha adaptado a la locomoción ondulatoria lateral, sistema basado en la contracción y relajación alternas de los paquetes musculares dispuestos a lo largo del eje longitudinal del cuerpo. Desciende con cierta rapidez por los terrenos en pendiente, pero en llano y en las cuestas, avanza con notable lentitud.

No es un reptil astuto, ya que si con frecuencia logra escapar de sus enemigos, se debe al hecho de que, cuando es apresado abandona en poder de su oponente un enorme fragmento de cola. Precísamente su nombre científico hace referencia a esta facilidad con que se separan las vértebras de la cola, (entre un 10% y un 20% más largas que las del resto del cuerpo), por distintos puntos de fracción. Una técnica de supervivencia que no se ve compensada con un alto poder de regeneración, como ocurre con otros saurios, pues los luciones sólo logran resarcirse de la pérdida con un pequeño muñón, nada vistoso, que le confiere el aspecto de culebrillas seccionadas.

Activo durante el crepúsculo

Su actividad es bastante crepuscular, por lo que resulta muy fácil encontrarlo al caer la tarde. Sin embargo, también se les puede ver durante el día, especialmente cuando está nublado y después de las tormentas.

lucion2Aunque es una especie que le encantan los ambientes húmedos, también disfruta calentándose al sol entre la vegetación que aún posee el rocío de la mañana. Otra forma por la que obtiene calor, es tendiéndose debajo de los objetos calentados por él, como piedras planas o bajo la vegetación. Una vez caliente, suele acudir en busca de alimento, basado fundamentalmente en lombrices, babosas y algunos insectos. Ello se debe a que es incapaz de atrapar animales más rápidos que él, si no es por sorpresa.

Se ha observado que para engullir una lombriz emplea de 5 a 6 minutos y que, al igual que las lagartijas, bebe gran cantidad de agua.

También se ha demostrado que sus diminutas glándulas labiales ubicadas en su mandíbula superior, segregan un líquido que, conducido a través de sus pequeños dientes curvos y huecos e inyectado a una lombriz, la provoca convulsiones que la conducen irremediablemente a la muerte. El lución se sirve a veces de este líquido para matar a sus presas. Sin embargo, cuando muerde el dedo del hombre, o su brazo, no sucede absolutamente nada; simplemente la impresión psicológica que pueda causar su mordedura, cuya importancia depende subjetivamente de cada persona.

A mediados de otoño, los luciones excavan un hoyo de 30 a 70 centímetros en el que se ocultan en grupos que oscilan entre diez y treinta ejemplares para hibernar. Allí permanecen inmóviles y entrelazados, hasta que reanudan su actividad en primavera, hacia mediados de marzo si el tiempo es favorable.

La llamada de la reproducción

A principios de abril se inicia su época reproductora y los machos luchan ferozmente por conseguir a las hembras. Los acoplamientos tienen lugar en primavera y durante ellos los machos sujetan fuertemente a las hembras con sus mandíbulas por el cuello.

Este animal presenta una característica poco común entre los saurios, es la facultad de incubar en su interior los huevos y parir a sus crías vivas.

Se ha comprobado que las hembras se reproducen, por lo general, cada dos años.

Los luciones son animales muy longevos que pueden vivir más de 40 años. De hecho, en cautividad se han logrado mantener ejemplares perfectamente durante 45 años.

¿Cómo reconocerlo?

Su alargado cuerpo, cubierto de escamas muy parecidas a las de las serpientes y de color pardo o gris cobrizo, puede llegar a medir 50 centímetros de longitud, si bien los ejemplares más comunes miden entre 30 y 40 cm. Si no ha perdido nunca la cola, ésta es más larga que el cuerpo, pero frecuentemente es más corta en los adultos, ya que generalmente se les suele romper y exhiben su cola regenerada.

Su cabeza, similar a la de las lagartijas, es más pequeña, al igual que sus ojos y oídos, cuya abertura auricular es muy visible.

La cola suele ser bastante más larga que el cuerpo. Las hembras poseen a menudo en los costados y en el vientre y una línea vertebral oscura, mientras que los machos presentan un colorido más uniforme, jalonado en ocasiones por manchas azules en los flancos. Los jóvenes, inconfundibles, están llamativamente coloreados de un intenso cromatismo dorado por el dorso, con el vientre y la línea vertebral negra.

A diferencia de las serpientes, el lución puede cerrar los párpados, su cola se rompe con facilidad y puede ser regenerada y posee varias hileras de escamas ventrales. Asimismo, su boca no es dilatable.

CURIOSIDADES

lucion3En el mes de septiembre tienen lugar los alumbramientos; cada hembra da a luz, generalmente escondida en cavidades del suelo o entre las raíces de las plantas, entre 7 y 19 crías completamente formadas, de un tamaño de unos 8 ó 9 centímetros, de longitud. Antes de nacer, o a veces fuera del cuerpo de su madre, se desprenden de la fina membrana semitransparente que les envolvió durante su vida embrionaria. Al nacer miden entre 6 y 9 centímetros y presentan un color blanquecino con reflejos azulados en la cabeza y el cuello; asimismo, una banda longitudinal azulada recorre el centro de su dorso. Durante sus dos primeros años de vida crecen con rapidez; así, al primer año ya han doblado su tamaño y miden 16-18 cm, mientras que al segundo miden 23 cm. Después su crecimiento se hace mucho más lento.