En este marco, el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha comentado que “la actualización de nuestros objetivos demuestra los sólidos avances que la compañía está alcanzando para ser neutra en carbono en 2050. La ambición, la tecnología y la ejecución de proyectos nos permiten incrementar la velocidad a la que llegaremos a este objetivo”.
La compañía incrementa la inversión en el periodo 2021-2025 hasta los 19.300 millones de euros, destinando 1.000 millones de euros adicionales con respecto a lo previsto en el Plan Estratégico, para aumentar su generación eléctrica renovable y su producción de hidrógeno libre de emisiones, e impulsar otras iniciativas bajas en carbono.
Repsol tiene el objetivo de liderar la transición energética, en línea con el Acuerdo de París, y limitar así el incremento de la temperatura global por debajo de los 2ºC. El avance tecnológico y el despliegue de proyectos actuales y futuros permite a la compañía aumentar su ambición en los objetivos de reducción de la intensidad de carbono. La nueva senda de descarbonización para alcanzar la neutralidad en 2050 establece una reducción del Indicador de Intensidad de Carbono del 15% en 2025, del 28% en 2030 y del 55% en 2040, frente a los anteriores del 12%, 25% y 50%, respectivamente.
La generación de energía eléctrica renovable es uno de los pilares en el modelo de descarbonización de Repsol. Los nuevos objetivos anunciados prevén un aumento del 60% de la capacidad instalada de generación renovable en 2030, hasta alcanzar 20 GW. En 2025, el nuevo objetivo de capacidad instalada se sitúa en 6 GW.