Arzuaga departió con María José Sanz, directora de BC3; Alexander Boto, director de Ihobe; y José Ignacio Hormaeche, director general del Clúster de la Energía, para abordar los retos del cambio climático. En ese contexto, agregó que “Petronor seguirá existiendo, pero será distinto: en constante transformación, con diferentes materias primas, procesos productivos, y con productos energéticos descarbonizados”, como recoge el compromiso de Repsol de ser neutro en carbono en toda su actividad en 2050.
“En España tenemos una oportunidad singular con la transición energética”, incidió Arzuaga, por las “buenas condiciones para la generación de energías renovables, producción de hidrógeno y derivados, y por tener una buena ubicación geográfica, cerca de grandes centros de consumo energético”. Con esa base consideró que “hay una oportunidad para que la industria energética se desarrolle más todavía en el futuro, y deberíamos aprovecharla y transformar el modelo económico, basado en la industria y en la tecnología, en las oportunidades que trae la descarbonización”.